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Entre las características que el destino ‘Costa de Almería’ ofrece a sus visitantes, destaca la gran tradición artesana que atesora. Una labor en la que han dejado su impronta, las múltiples civilizaciones y asentamientos que han pasado por la provincia con el paso de los siglos y de los que se conserva buena parte de sus alfares históricos y colecciones tradicionales para fuego y agua.
De norte a sur y de este a oeste, la provincia sorprende al visitante en su viaje por Almería con las diferentes muestras de la expresión de este arte, que van desde la herencia alfarera de sus pueblos hasta los prestigiosos trabajados elaborados en mármol pasando por los útiles de esparto y los vistosos telares en los que se confeccionan las jarapas.
La Comarca de Níjar es uno de los grandes centros alfareros de la comunidad andaluza, caracterizado por sus cántaros con vidriado multicolor, fuentes, platos, tazas, cántaros y otras piezas de cerámica. Una ornamentación heredada de su pasado fenicio y árabe.
Por otro lado, el esparto es otro de los pilares sobre el que se sustenta la artesanía en la zona de Níjar y Parque Natural. Una estampa típica de esta Comarca lleva al turista a encontrar sentados en las puertas de sus casas a vecinos que con sus propias manos elaboran cestas, figuras o cualquier otro elemento decorativo para el domicilio. Una tradición heredada de antaño cuando utilizaban sogas y cuerdas para confeccionar cestos, zapatos o cinturones. Junto a la cerámica destacan también los trabajos elaborados en jarapas, tela que, en sus orígenes, era elaborada con retales que sobraban, y de ahí su gran colorido.
De gran vistosidad son también los artículos que se elaboran en Mojácar, además de en otros pueblos de la provincia, los turistas que visiten este municipio pueden llevarse como recuerdo collares, pendientes, camafeos y otras joyas elaboradas con el coral rojo que se extrae de las proximidades de la Isla de Alborán.
Desde el levante viajamos hasta la Comarca del Mármol para conocer la tradición que ha hecho tan conocido al ‘oro blanco’. Aunque los trabajos en mármol extraído de la Sierra de Los Filabres han terminado desarrollando una gran industria a su alrededor y ornamentando monumentos tan insignes como la Alhambra de Granada, la Mezquita de Córdoba o el Monasterio de El Escorial, en Madrid; existen talleres que elaboran de manera artesanal todo tipo de objetos decorativos con esta materia prima.
Pero no sólo de mármol vive la artesanía de esta comarca, también es frecuente encontrar a profesionales elaborando piezas únicas en cerámica, y alfarería, especialmente en los municipios de Tíjola, Serón o Albox, donde se encuentra el alfar de Los Puntas, declarado Patrimonio Histórico Artístico por su antigüedad, por el mantenimiento de sus instalaciones y por la continuidad del proceso completo de la alfarería tradicional.
La artesanía de madera tiene una referencia clara en la Comarca. El escultor Pedro Gilabert ha sabido dotar de vida a los troncos, convirtiéndose en una referencia a nivel nacional. Cuenta con un museo en Arboleas y ha conseguido fraguar un estilo propio que ha dejado huella en distintos artistas.
Una gran apuesta por la provincia y por los productos que nos representan que cuentan con la difusión y promoción del Servicio Provincial de Turismo. Su delegado y vicepresidente de la Diputación, Javier A. García aboga, precisamente, por la continuidad de esta labor que se hace desde la institución para llevar los productos y recursos turísticos de los 102 municipios que dan vida a nuestro destino por todo el mundo y que ponen de manifiesto “la oferta de productos y artesanía de primer nivel que es nuestra mejor tarjeta de visita y recuerdo que se llevan los turistas cuando visitan nuestra provincia”.
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