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Mañana, viernes, 16 de octubre, se conmemora el Día Mundial de la Alimentación. Una efeméride a la que el Colegio de Farmacéuticos de Almería quiere sumarse recordando a la población la estrecha vinculación existente entre una correcta nutrición y alimentación con la prevención de enfermedades y patologías y el fortalecimiento de la salud. En palabras de Miguel Jorge, vocal provincial de Alimentación y Cuidado de la Salud, “mientras 820 millones de personas están subalimentadas, 672 millones de personas son obesas, según datos de la FAO. En los últimos treinta años los índices de obesidad se han triplicado en todo el mundo. Y España es uno de los países europeos con tasas de obesidad más elevadas. Estos índices de obesidad favorecen la aparición de enfermedades no transmisibles que suponen el 80% del gasto sanitario, lo que las convierte en un verdadero problema para la sostenibilidad del sistema sanitario”.
Siguiendo la guía de los objetivos de desarrollo sostenible de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el Colegio de Farmacéuticos recuerda que es muy conveniente elegir productos locales, variados, frescos y de temporada; añadir variedad con legumbres, frutos secos y cereales, reducir al mínimo la “comida basura” y fomentar una merienda sana; seguir la regla de un tercio de verduras, revisar los etiquetados y no dejarse influenciar por la publicidad engañosa; o tener especial cuidado también en el consumo de bebidas procesadas.
“La búsqueda de dietas saludables a partir de sistemas alimentarios sostenibles nos ha traído el nuevo concepto de “Dieta de Salud Planetaria”, que aumentaría el consumo de productos vegetales como frutas, verduras, legumbres, cereales integrales y frutos secos y la reducción del consumo de carnes rojas y procesadas, así como el consumo de azúcares añadidos. Estos alimentos, favorecedores de la salud, tienen menor impacto ambiental en su producción y además ayudan a cumplir los objetivos de sostenibilidad. Siendo la situación preocupante quiero poner un punto de optimismo: aunque es difícil hacerlo, sabemos lo que hay que hacer. Este es el enorme reto al que nos enfrentamos en los próximos años”, concluye Miguel Jorge.
Hay que recordar que el Colegio de Farmacéuticos de Almería celebró el pasado año las jornadas ‘La farmacia cuidando de tu alimentación’, que reunieron a más de un centenar de profesionales en la sede de la Capitalidad Gastronómica. En dicho evento, quedó reflejado que la alimentación de calidad y equilibrada es uno de los factores en la ecuación del estilo de vida saludable.
Algo fundamental en lo que el farmacéutico tiene mucho que decir “por los conocimientos adquiridos durante nuestra formación, por nuestra posterior especialización y porque somos el profesional sanitario más cercano a la población en muchos casos, prestando un servicio de cuidado integral del paciente, reforzando herramientas que ayudan a preservar su salud y dando consejos nutricionales a la hora de tomar medicamentos”, recuerda la presidenta del Colegio de Farmacéuticos, Gema Martínez.
Claves: la farmacia cuidando de tu alimentación
• La alimentación es la segunda salida profesional más importante del farmacéutico, a continuación de la farmacia comunitaria. Muchos farmacéuticos cuentan con una doble titulación que incluso les permite realizar dietas personalizadas de acuerdo a la normativa legal vigente.
• El farmacéutico mantiene una actitud unida al progreso, como profesional comprometido con la formación continuada, enseñando a comer sin miedo, de la mano de la nutrigenética, la nutrigenómica y la erradicación de los falsos mitos en alimentación.
• Las oficinas de farmacia son un eslabón fundamental del sistema sanitario, al colaborar en la detección precoz del sobrepeso, la obesidad y los trastornos de la conducta alimentaria y desarrollar los programas necesarios para lograr su prevención, en colaboración con las autoridades sanitarias. Cada semana más de 367.000 personas toman su peso y talla en la farmacia.
• El farmacéutico comunitario, por su cercanía, acompaña al ciudadano en las distintas fases de la vida que precisan de necesidades alimenticias especiales, como son el embarazo, la lactancia, la tercera edad, o la preparación de actividades deportivas.
• La intervención del farmacéutico es fundamental para analizar la interacción que puede producirse entre los medicamentos y ciertos alimentos, ya que la correcta absorción de los mismos puede verse limitada por una comida con un elevado contenido en grasas, fibra, metales, etc.
• Los alimentos con propiedades antioxidantes no curan enfermedades pero ayudan en gran medida a impedir que se desarrollen o que se retrase el inicio cuando hay un fuerte condicionante genético.
• La flora intestinal de una persona puede llegar a alcanzar los 2 kg de peso, de ahí la importancia de mantenerla en equilibrio, aportando los nutrientes necesarios a través de una alimentación saludable.
• Alimentarse bien es uno de los mejores y más seguros caminos para proteger, cuidar y mejorar la salud. Hay que convertir los valores y las tradiciones gastronómicas no sólo en un referente cultural o de turismo: también en un modelo de salud.
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