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Me recuerda mi regadera una secuencia vivida de mi profesor favorito, Cojonciano Ceropelotéz, que tras arduos y escabrosos años dedicado a la investigación y posterior tratado de “Vida y desventura de los Escarabajos Peloteros” llego a la conclusión que no hacía falta tantos años para llegar al desenlace final de exponer con nítida claridad tales secuencias y derroteros del bicho ya que al poder darse un garbeo por Génova-13, le hubiera ahorrado tantos esfuerzos y dedicación cuando le hubiera sido más fácil titular el tratado como“ Los ladrones que cambian de casa”
Cuando una casa se debilita por la imagen y nefasto perfil que da y su contorno esta mirado bajo lupa judicial, surgen sospechas de fantasmas de dudas que han anidado en su interior y hasta la mudanza es observada con desconfianza. La Agencia, “Mudanzas Convenientes” destina varios camiones para trasladar sus enseres y hasta documentación comprometida bajo la atenta mirada de su máximo responsable que analiza preocupado hasta las huellas que utilizaban sus residentes en los vasos de plásticos del café. (No contaban que podía descargar nieve en Agosto)
En la premura del traslado, ese máximo responsable comunica que no piensa dar explicaciones sobre casos del pasado que “afecten a personas desligadas de Partido aunque antes fueran dócilmente coaligados” (Sede de la casa que piensan deshacerse por el tufillo desprendido de sus paredes) Proclama el mismo - el “infortunado inquilino” - que va a “regenerar sin actitudes inquisitorias actitudes y condiciones con claridad y firmeza ante una opinión pública que le ha dado las espaldas en Cataluña y hasta los guardaespaldas no le votaron” Cierto es que su cama le está quedando estrecha al darse cuenta de la crisis generalizada de la derecha como Partido le lleva a camuflar/soslayar en lo posible que fue portavoz del ínclito Aznar sin saber o notar que la historia no concede olvidos.
Casado y sus acólitos, tratan de que no les asocien con las telarañas del pasado y urge un pronto traslado olvidando la caja B, llamada también caja “chica”- aunque debía ser enorme en tamaño por su volumen - para dar el primer paso en desvincularse del pasado para eludir posibles responsabilidades políticas presentes y desatarse de esa contabilidad paralela que por lo visto, tenía más trampas que una película china y no poner en tela de juicio esa lealtad que forzosamente no tenía que ir acompañada de la dignidad.
El PP hace su mudanza y pone esa Sede en alquiler. Visto su anterior transcendencia de tramas, corruptelas, ilegalidades, infracciones y delitos, posiblemente la alquilen a personajes de “nariz hebrea” que inhalan el tufillo desprendido en sus departamentos para formalizar entidades dedicadas a la usura y la especulación, simplemente, por estar a tono con el ambiente dejado por nombres propios que son tantos que ya no caben en el santoral. Se resguardan y encima condenan la provocación de una “tormenta perfecta” y sólo les falta cambiar la Sede a Andorra dado la masificación que sufre las islas de paraísos fiscales donde pasaban a ser devotos isleños.
Tiendo a la desaparición de una derecha del neo clasicismo rodeada de chanchullos que ya no tratan ni es posible ocultar su ascendencia y posterior decadencia. Es conveniente una nueva derecha democrática, actual, moderna, consecuente, que aíslen todos los apaños de sus otrora dirigentes ante el recelo que despierta una ultraderecha nazista que se nos eche encima y que sea un tapón para que los nostálgicos retrógrados afligidos dejen de esparcir su mente obtusa. Una derecha como opositora a que el fanatismo de apenados ultras no tenga rincón donde resguardarse y así, limitar su auge. Lo malo es que nunca ha habido una Derecha decente y confiable ya que parece ser que cuando fallan los líderes cambian los edificios y se mudan.
Juna Marcelo
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