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‘Mescalina’, ‘Mediterráneo’ o ‘Un español en Nueva York’ son himnos por todos reconocidos que cantaron a coro los incondicionales que llenaron la Plaza de la Constitución en el concierto que Los Rebeldes ofreció en la primera noche de #AlmeriaenFeria.
Un regalo del Área de Cultura del Ayuntamiento de Almería, tras el pregón, y que ha permitido volver a escuchar el rock auténtico de una banda legendaria, con 45 años en la carretera, comandada por el mítico Carlos Segarra. Nombrar a Los Rebeldes y a Carlos Segarra es hacerlo de un auténtico símbolo del rock and roll en España, y anoche demostraron, sin querer caer en tópicos, que “los viejos rockeros nunca mueren”.
Acompañados por una banda excepcional, con el carismático Dani Nello al saxo, impusieron un ritmo frenético basado en el rockabilly, que han aderezado con influenciasdel soul, el surf, el country o el swing. Un estilo propio, marcado por la inconfundible voz de Carlos Segarra, y bajo el lema ‘Cervezas, chicas y rockabilly’, título de su primer histórico disco, y que cuatro décadas después tienen marcado a fuego.
Durante el concierto, sus seguidores cantaron, bailaron y corearon canciones, como ‘Agua de Valencia’, ‘No quiero verte’ o ‘Mía’, en una demostración de que el rock sigue vivo y que conciertos como el de Los Rebeldes motivan para seguir disfrutando de bandas legendarias que ofrecen actuaciones memorables, y muestran la belleza de la música interpretada en directo, sin sonidos pregrabados, con batería, guitarra, saxo y contrabajo.
El vestuario, las poses y la musicalidad transmiten autenticidad en cada estrofa, y trasladan a unos sonidos genuinos de libertad que hicieron las delicias de un público entregado y coetáneo que anoche disfrutó con una de las bandas que le han acompañado a lo largo de su vida. Los Rebeldes conservan la esencia del rock&roll. Brillantes.
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