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La Federación Almeriense de Asociaciones de Personas con Discapacidad, FAAM, y las asociaciones miembro que representan a afectados de enfermedades crónicas, rechazan la resolución del Ministerio de Sanidad publicada el pasado 18 de septiembre en el BOE, y que obliga a las comunidades autónomas a poner en marcha el sistema de copago para fármacos de dispensación hospitalaria.
Esta medida obliga a las autonomías a desplegar sistemas de cobro en las farmacias hospitalarias a partir del próximo 1 de octubre, ya que los enfermos crónicos de determinadas patologías tendrán que pagar al retirar la medicación, un 10% del precio de cada medicamento que trate su enfermedad. Es decir hasta 4.20 € por cada tipo de medicación vinculado a su tratamiento. Son 42 los medicamentos incluidos en la medida de copago publicada por el BOE y que se dispensan a pacientes crónicos no ingresados y que hasta ahora los han retirado de manera gratuita. Esclerosis Múltiple, Artritis reumatoide, o cáncer de riñón son algunas de las enfermedades que son tratadas con algunos de los medicamentos incluidos en el listado, muchos de ellos permiten además de tratar la enfermedad, mejorar los síntomas de la misma y por lo tanto la calidad de vida de los pacientes afectados.
Aunque en Andalucía la Consejera de Salud, Mª José Sánchez, ha expresado que será la Junta la que pagará estos fármacos, la medida ha generado preocupación entre las asociaciones integrantes de FAAM que representan a enfermos crónicos. De este modo Isabel Martínez, Presidenta de la Asociación de Esclerosis Múltiple, AEMA, explica que ésta medida se suma a las muchas que se han ejecutado en los últimos meses y que dificultan el acceso al tratamiento. “El primer copago farmacéutico, la reducción presupuestaria destinada a investigación y ahora esto, puede suponer que los afectados que muchos contamos con pensiones no contributivas, tengamos que decidir entre darle de comer a nuestras familias o seguir con el tratamiento”, traslada Martínez que incide que muchos de los pacientes con Esclerosis Múltiple tienen hasta tres tipos de medicinas distintas que retiran de la farmacia del hospital cada mes y el nuevo copago “supone volver a ponernos entre la espada y la pared”, afirma rotunda la Presidenta de AEMA.
Desde la Asociación de Autoinmunes y Luspus, ALAL, muestran su indignación ante esta medida ya que no tener acceso a muchos tratamientos importantes “nos llevaría a que este tipo de enfermedades se hicieran más crónicas y por lo tanto a mermar considerablemente la calidad de vida de los afectados”.
Valentín Sola, Presidente de FAAM, explica que aunque pueda parecer poca la cantidad de copago farmacéutico hospitalario, “para las personas con discapacidad y además afectadas de alguna de las enfermedades crónicas citadas anteriormente, éstas ya soportan un mayor gasto sólo por el hecho de tener discapacidad, ya que de sus ingresos destinan un tanto por ciento muy elevado a gastos derivados de esa discapacidad”. “Situaciones que se agravan si se tiene en cuenta el observatorio de la discapacidad y estudios recientes los ingresos de las familias con miembros con alguna discapacidad ya cuentan con ingresos inferiores de un 25% a la media”, apunta el Presidente de la Federación.
Otras asociaciones como ALCER, que trabaja por los afectados del riñón en nuestra provincia, muestra su preocupación ya que el copago puede dar pie a que muchos enfermos dejen de tomar la medicación algún día de la semana por carecer de recursos económicos suficientes. “Esto agravaría la enfermedad y provocaría que aumenten los ingresos hospitalarios y la asistencia a consultas médicas, con lo que la medida supone un arma de doble filo para el sistema sanitario público de nuestro país”, apunta Manuel Vicente, Secretario de Alcer Almería.
José López, es presidente de la Asociación de Laringectomizados en nuestra provincia y aunque expectante de ver qué pasará finalmente en Andalucía considera que el gobierno no se ha puesto en la piel del los enfermos crónicos que son pensionistas, personas a las que por sus ingresos les sería imposible acatar el copago.
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