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Ecologistas en Acción quiere denunciar que, un año más, el 17 de enero, la comarca de Níjar ha amanecido envuelta en una bruma artificial generada por la quema de residuos agrícolas de todo tipo. Aprovechando una tradición popular, como es la de las hogueras de San Antón, los desaprensivos de siempre aprovechan para quemar de forma incontrolada todo tipo de residuos con el objetivo de ahorrarse los costes de su gestión.
Decenas o centenas de hogueras hicieron arder restos vegetales y plásticos durante la noche del 16 al 17 de enero hasta el punto de que al amanecer una extraña niebla (smog) con olor acre envolvía toda la comarca de los campos de Níjar.
El problema de salud pública es evidente ya que el humo con el que han amanecido los pueblos de la zona causa problemas respiratorios y es “per sé” cancerígeno. Pero no queda ahí la cosa ya que la quema de plásticos y otras sustancias artificiales añade el riesgo de generación de dioxinas, las sustancias más peligrosas de las “creadas” por el ser humano.
Ecologistas en Acción pide a los agricultores que no aprovechen estas festividades (como también ocurre en la noche de San Juan) para quemar residuos que la legislación obliga a tratar adecuadamente. La imagen de la agricultura almeriense, motor de la economía local, se ve seriamente perjudicada por estas actuaciones ilegales e irresponsables por la falta de consideración de unos pocos hacia los demás y hacia el Medio Ambiente.
La población de Níjar y de las cercanías no tiene por qué aguantar estas situaciones que se repiten año tras año, por lo que Ecologistas en Acción pide a los Ayuntamientos y a la Consejería de Medio Ambiente que controlen y sancionen estas prácticas, tal y como es su responsabilidad y obligación.
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