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Carmen María González Piedra, la almeriense que ira en las listas del PA para las elecciones europeas desgranó en una entrevista la principal causa por la que acepto intentar representar a su provincia en Europa “ En 1951 nace la CECA, Comunicad Europea del Carbón y del Acero que es antecesora de la “Europa de los seis”, formada por Francia, Alemania Occidental, Italia, Bélgica, Luxemburgo y los Países Bajos. Quedan fuera Reino Unido y Suiza por su tradicional reticencia a ceder a las iniciativas de los otros países y España por su régimen político.
El 1 de enero de 1958 entra en vigor el “Tratado de Roma” que aunque en la práctica constituyó una unión aduanera básicamente, en el preámbulo del Tratado se recoge el objetivo político de integración progresiva entre los países miembros, queda fundada la CEE, Comunidad Económica Europea. Con la sucesiva incorporación de países miembros se va aplazando el objetivo de integración política y la Comunidad Económica Europea.
En 1986 España y Portugal se adhieren a las Comunidades Europeas y ya se comienza a hablar de la “Europa de los doce”. El 1 de julio de este mismo año entra en vigor el “ACTA ÚNICA EUROPEA” que supone un progreso en el objetivo de la integración, ampliando las competencias comunitarias en materia de política exterior, medio ambiente e investigación y desarrollo.
El 9 de noviembre de 1989 cae el muro de Berlín y comienza la reunificación alemana, de manera que el 1 de julio de 1990 se firma el Tratado de la Unión Monetaria, Económica y Social entre la RFA, la RDA y el Bundesbank. El 2 de octubre la Región de la Antigua Alemania Oriental se integra en la CEE.
De manera que cuando comienza la crisis se concede un crédito a la Banca alemana de 480000 millones de euros en unas condiciones que no se han concedido a otros países, estas circunstancias se debieron a que el enorme coste de la reunificación alemana obligó a su banca a seguir una política económica muy agresiva, de manera que en 2008 se encontró con un agujero de más de 300000000000 -trescientos mil millones de euros- únicamente de malas inversiones en productos financieros norteamericanos y no por inversión en “ladrillo” como en España.
En este recorrido es evidente que la integración política ha perdido la partida, la prioridad de la unificación alemana ha propiciado que regiones de Europa más desfavorecidas como Andalucía hayan perdido posibilidades de acercarse a la media europea.
Por otro lado la pendiente reforma agraria en Andalucía ha permitido que los grandes beneficiarios de las ayudas europeas a la agricultura, sigan siendo los grandes terratenientes, los oligarcas de siempre.
La avalancha de países que se quieren integrar en la Unión europea -28 en la actualidad- por su estabilidad política y económica, ha propiciado la filosofía de potenciar las economías de esos países para evitar una UE ingobernable, lo que en la realidad se está demostrando en numerosos temas, el tratamiento de la crisis entre otros. Se pretende que la economía europea sea industrial y tecnológica, de manera que se vayan perdiendo actividades como la pesca o la agricultura en favor de esos terceros países y en contra de los intereses de Andalucía que ha visto mermar su flota pesquera y está viendo como terceros países compiten en mejores condiciones con nuestros productos agrícolas en los mercados europeos.
Si los europeos hemos perdido la integración política como medio de desarrollo igualitario, si hemos visto como la UE se vuelve cada vez más ingobernable y los andaluces en particular vemos como disminuyen nuestras posibilidades de acercarnos a la media europea, estamos comprobando como con el beneplácito de nuestros representantes en Europa, nuestra actividad económica se está limitando a la industria del turismo, que funcionará mientras se prolongue la coyuntura actual en los países que son nuestra competencia y a ser productores de mano de obra sin cualificar, para lo cual ya se están instalando en nuestro territorio representantes de empresas que enseñan lo básico del idioma y el trabajo a quienes después van a escoger para que trabajen en su país, temporalmente.
En Andalucía cada vez más necesitamos que las personas que elegimos para que nos representen en las Instituciones, sean personas que tienen a Andalucía y a los andaluces como prioridad. Estamos hartos de ver como nuestros intereses quedan en segundo plano ante una Unión Europea plegada a los intereses de Alemania y Francia y de unos políticos españoles que sólo tienen ojos para el Gobierno de España.
Queremos que en Europa se nos reconozca por nuestra valía, nuestro tesón, nuestra historia y nuestra cultura y no por ser unos pusilánimes que bailamos la primera milonga que nos tocan.
En el PA solo tenemos una cosa en la mente, Andalucía y los andaluces y desde el Partido Andalucista de Almería estamos a vuestra disposición para atender cuantas propuestas e iniciativas nos queráis trasladar y para explicaros e informaros sobre los temas de vuestro interés.”
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