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El Centro de Menores Infractores ‘El Molino’ celebra hasta el próximo sábado, 1 de marzo, su I Semana Sociocultural. Setenta jóvenes participan en este proyecto con espacio para el voluntariado medioambiental, la sensibilización social, el arte, el deporte, la música y la gastronomía andaluza. La delegada del Gobierno de la Junta, Sonia Ferrer, que ha visitado el centro en la mañana dedicada a la creación de stands solidarios, ha señalado ‘el valor de este tipo de iniciativas que transmiten, a través de actividades lúdicas, valores humanos y habilidades sociales imprescindibles para la reeducación de estos jóvenes’.
Representantes de las asociaciones ‘Greenpeace’, ‘Aimur’ y ‘Fundación Secretariado Gitano’ han explicado a los jóvenes la labor que realizan en el ecologismo, la atención a mujeres en riesgo social y en la integración de la comunidad gitana, respectivamente. Además, han podido conocer el trabajo de la Sociedad Protectora de Animales de Roquetas de Mar y los servicios y programas que ofrece el Instituto Andaluz de la Juventud. Junto a las competiciones deportivas, la programación incluye también actividades culturales en torno a la poesía, el cine, la música y la fotografía. La actuación de la bailaora flamenca María ‘La Rabota’ precederá a la clausura, el sábado, de esta I Semana Sociocultural.
En su visita, Sonia Ferrer ha destacado que las inversiones de la Junta han permitido que Andalucía cuente con un completo mapa de recursos para atender de forma integral cualquier situación prevista en la Ley Orgánica de Responsabilidad del Menor. ‘Los recursos destinados a la justicia juvenil y la calidad del trabajo que realizan los profesionales han convertido a la provincia de Almería en un referente en este ámbito’, ha resaltado la delegada del Gobierno.
Además de las medidas impuestas por los juzgados de Menores, otra de las prioridades de la Consejería de Justicia e Interior es favorecer la mediación con los jóvenes para contribuir a la resolución extrajudicial de los conflictos y aligerar, además, la carga de trabajo de estos órganos judiciales.
Centro de internamiento ‘El Molino’
El centro de internamiento de menores infractores ‘El Molino’ en Almería dispone de 70 plazas entre régimen abierto, semiabierto y cerrado, de las cuales 58 son para chicos y 12 para chicas. Este servicio de la Junta, gestionado por la Asociación Meridianos, ofrece una serie de recursos para la reeducación de los jóvenes como formación reglada, educación secundaria para personas adultas, cursos de alfabetización, cursos de neolectores, bachillerato y ciclos formativos. Además, en este centro se imparte también formación profesional a través de talleres de carpintería, hostelería, mantenimiento, pintura, informática, jardinería, carpintería metálica, fotografía y peluquería, así como otros cursos de capacitación para el empleo, programas de inserción laboral y de intervención psicosocial.
Tasa de no reincidencia
Un estudio sobre Justicia Juvenil realizado por la Universidad almeriense con la colaboración de la Junta pone de manifiesto que el 86,6% de las medidas judiciales adoptadas con los menores infractores en Andalucía son de medio abierto, frente al 13,4% que exigen un internamiento en un centro.
El estudio universitario ‘Justicia Juvenil en Andalucía. Diez años de funcionamiento de la Ley Orgánica de Responsabilidad del Menor’ refleja que la efectividad de la reeducación en Andalucía con los menores infractores alcanza un índice muy alto, ya que la tasa de no reincidencia tras finalizar la ejecución de una medida judicial supera el 80%.
Según el estudio, el número de detenciones de menores en Andalucía es estable y se cifra en un promedio de 4.000 al año, algo que le sucede a uno de cada cien andaluces con edades comprendidas entre los 14 y los 17 años. Las causas de detención más frecuente durante los diez años de vigencia de la Ley Orgánica de Responsabilidad del Menor son el robo con fuerza (21%), la sustracción de vehículos (17%) y el robo con violencia e intimidación (14%).
El perfil del menor reincidente en las infracciones es el de un varón (93%) que en el 89% de los casos sólo reincide una vez. Por su parte, el perfil medio de todos los menores infractores es el de un chico de entre 16 y 17 años, al que se le impone una medida de libertad vigilada.
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