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El Grupo Municipal Socialista ha denunciado “el grado de manipulación informativa del equipo de gobierno popular del ayuntamiento de Huércal-Overa respecto al contenido de los plenos municipales”, el cual “es absolutamente intolerable”.
En el trascurso del último pleno celebrado en nuestro ayuntamiento el grupo municipal socialista se alegró de que la resolución administrativa del consejo consultivo de Andalucía, respecto a la resolución del contrato de la piscina cubierta, fuese favorable a los intereses municipales. Para los Socialistas “este era, es y será nuestro interés, manifestado en diferentes ocasiones, la apertura de la piscina cubierta en el menor tiempo posible”. Lo cual no quita “que planteamos nuestras dudas ante un incierto proceso judicial al que parece abocado este asunto”.
Los Socialistas “se alegran del deseo del Grupo Popular de incentivar el uso de la piscina municipal cubierta por parte de amplios sectores de la población de nuestro municipio”, pero añadiendo que “si este apoyo se hubiese plasmado desde el inicio de su mandato la piscina jamás se hubiese cerrado ni la empresa tendría que haber abandonado”. Para el PP la piscina cubierta “era un postizo, no la consideraban instalación municipal al 100% y por eso pusieron cuantos impedimentos pudieron en la gestión municipal indirecta de esta instalación. Aún más alejados estaban de los trabajadores que allí prestaban sus servicios, por el único motivo de no haber sido seleccionados por ellos y por tanto, eran sospechosos cuando menos de socialistas, algo especialmente grave para ellos”.
Pero si de este pleno cabe destacar alguna actitud, fue la nueva perdida de papeles del portavoz popular, que fuera de su discurso “populista, demagógico y con insinuaciones y provocaciones permanentes”, como preguntarse si había connivencia con la empresa, “situación absolutamente falsa y a la que pueden responder los responsables de la misma, en Huércal-Overa”.
Cuando se le terminaron sus “escasos argumentos” recurrió a lo más manido, insultos a la oposición sin que en ningún momento el alcalde le pidiese mesura y sosiego en sus apreciaciones.
Finalmente el Grupo Municipal Socialista remarcó nuevamente “nuestro deseo es que la piscina se abra al público lo más pronto posible, pero ante la falta de coherencia entre las decisiones que se toman en la actualidad y cuál ha sido la actitud respecto a la gestión de la piscina municipal por parte del Equipo de Gobierno Popular, y la actitud especialmente faltona de su portavoz, nuestro voto fue la abstención, añadiendo nuestra predisposición, una vez superados los trámites para poder reabrir y con un análisis veraz del modelo de gestión más oportuno, directo o con empresa concesionaria, apoyarla en todos sus términos”.
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