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El ayuntamiento de Pechina pone en marcha una campaña de concienciación para la recogida de excrementos caninos, un gesto sencillo que puede suponer “un grandísimo beneficio para la ciudad y sus habitantes, mejorando la convivencia y evitando graves problemas”, según se informa en los folletos divulgativos que el consistorio local está repartiendo en todos los negocios del municipio para llegar a todos los vecinos y vecinas del municipio.
A través de la concejalía de Medio Ambiente, el consistorio pechinero acaba de lanzar una campaña informativa dirigida a los dueños de perros y destinada a procurar una mejor limpieza del pueblo, libre de los excrementos caninos que nuestras mascotas no pueden recoger por si solas. Conscientes de los numerosos beneficios que aporta la compañía de un animal en el hogar, el ayuntamiento de Pechina recuerda a sus vecinos/as que la recogida de las deposiciones es “una cuestión de hábitos” que supone “un mínimo esfuerzo”. Sin embargo, este pequeño gesto “colectivo” se convierte en un “grandísimo beneficio para la ciudad y para sus habitantes, mejorando la convivencia y evitando graves problemas”.
Además de la mala imagen y los riesgos de caídas, la presencia de excrementos caninos en la vía y espacios públicos supone una importante fuente de contagio de enfermedades entre las mascotas y las personas. En este sentido, se presta especial atención a una idea bastante difundida pero errónea, como es el supuesto “beneficio” como abono de las deposiciones en jardines y zonas verdes. Muy al contrario, explican desde el consistorio local, “si lo haces estarás provocando un foco de infección y reduciendo el espacio de esparcimiento y disfrute de todos, pero especialmente de nuestros niños”. Precisamente los menores entre 2 y 7 años son un grupo de riesgo en el contagio de la Toxiocariasis, en zonas donde proliferan los excrementos caninos, llegando a producir una enfermedad ocular importante.
La difusión de esta campaña de concienciación supone un paso más en la labor municipal por erradicar de sus espacios públicos las “cacas de los canes”, recordando a los dueños de perros el uso de los diferentes “sanecane” instalados por el ayuntamiento en diversos puntos del municipio para facilitarles la labor, como son: Plaza de la Iglesia, Parque Almariyya, calle Federico García Lorca, calle Quevedo, Camino Marchal de Gómez, esquina calle Obispo Casanova con calle Sagitario, Camino Alto y los Baños de Sierra Alhamilla.
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