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Un total de 150 mujeres han participado en los talleres de los grupos socioeducativo (GRUSE) de los centros de atención primaria del Área Sanitaria Norte de Almería, el último de ellos realizado en el centro de salud de Macael. El objetivo de esta iniciativa de la Consejería de Igualdad, Salud y Políticas Sociales es mejorar la salud de mujeres adultas que acuden a la consulta en los centros de salud y que necesitan apoyo para enfrentarse a tareas de la vida diaria.
El proyecto GRUSE forma parte de la estrategia de promoción de Salud Mental y prevención de los trastornos mentales del Plan Integral de Salud Mental de Andalucía. Estos grupos están dirigidos mujeres adultas entre 30 y 65 años que acuden a consulta en los centros de atención primaria y que necesitan apoyo para enfrentarse a la vida diaria con mayores oportunidades de éxito. Las mujeres que participen en estos grupos se benefician de un espacio que facilita la potenciación de sus habilidades emocionales y permite el abordaje de los determinantes de género asociados al malestar que sienten.
Esta actividad grupal se desarrolla desde atención primaria y está organizada en ediciones de ocho sesiones como mínimo. En cada edición, se forma un grupo de un máximo de 15 personas, que durante un período de ocho semanas asisten a una sesión inicial, seis sesiones de contenidos para potenciar sus activos en salud mental y una última sesión de cierre.
Se incluyen en estos grupos a mujeres que presentan síntomas inespecíficos de malestar físico o emocional sin explicación fisiológica aparente, junto a una percepción de incapacidad para manejar o afrontar situaciones adversas, derivadas de complicaciones sociales o personales; así como a aquellas que sufren acontecimientos vitales o situaciones problemáticas que no aparecen como un factor de riesgo, pero que suscitan demanda de ayuda o atención.
El acceso a estos grupos se hace a través de los profesionales de los centros de atención primaria que realizarán la derivación través del trabajador social del centro de salud, que será el referente y el conductor del grupo. También cabe la posibilidad de acceso por iniciativa propia de la mujer dirigiéndose al la Trabajador Social de su centro de referencia, que organizará la inclusión en el Programa.
Este tipo de intervenciones han mostrado su eficacia para el desarrollo de herramientas que permitan a los participantes evitar el aislamiento social. En grupos de mujeres se ha comprobado su eficacia ya que desarrollan habilidades personales de adaptación y superación y elevan la autoestima y la seguridad, elementos esenciales para modificar comportamientos y conductas capaces de influir sobre los determinantes en salud.
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