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La diputada autonómica del PSOE de Almería Noemí Cruz ha mostrado hoy su pesar por la posibilidad de que Ciudadanos vaya a “entregar a las mujeres andaluzas a cambio de unos sillones en la Junta de Andalucía”, después de que Vox exigiera ayer a PP y Cs que descarten cualquier medida en defensa de la igualdad de género si quieren contar con los votos de la ultraderecha. La responsable socialista ha recordado que Ciudadanos “ha sobrepasado muchas veces ya sus líneas rojas, después de decir que nunca pactarían con radicales y que dejarían gobernar a la lista más votada”, aunque ha saludado que “la vida parlamentaria les haya vuelto a regalar una oportunidad de oro para mostrar coherencia”. “Están a tiempo de dejar gobernar a quien ha ganado las elecciones, que ha sido el PSOE de Susana Díaz”, ha señalado.
Cruz ha mantenido que, el pasado 2 de diciembre, los andaluces “no le dijeron a Ciudadanos que pusiera el Gobierno de esta tierra en manos de la extrema derecha y mucho menos le dijeron que desprotegiera a las mujeres a cambio de sillones”. “¿De verdad están dispuestos a todo?”, se ha preguntado. “Ciudadanos tendrá que decir una vez más, en este capítulo 2 del Pacto de la Vergüenza, del lado de quién va: si está con las mujeres o si siguen abrazados a la ultraderecha y piensan entregar las vidas de las víctimas de la violencia machista a cambio de unos sillones”, ha advertido.
La parlamentaria del PSOE de Almería ha asegurado que “no hay duda de que el PP aceptará lo que Vox le ponga por delante”. “Al PP le cabe todo porque Moreno Bonilla es consciente de que si no es presidente no es nada, ni en Andalucía ni en su partido”. “El quid de la cuestión es que sin Vox no hay mayoría suficiente, Ciudadanos y el PP necesitan a la ultraderecha para gobernar y ya es hora de que empiecen a reconocerlo públicamente”, ha reclamado.
En una rueda de prensa en la que ha comparecido acompañada por una representación de las mujeres del PSOE de Almería, Cruz ha lamentado que, en sólo seis meses, en Andalucía se haya pasado de hablar de la nueva Ley andaluza contra la Violencia de Género a presenciar el órdago de Vox en contra de la igualdad.
Ley contra la Violencia de Género
En un escenario en el que mil mujeres y niños son atendidos cada año en casas de acogida y en el que han sido asesinadas más de mil mujeres por sus parejas o ex parejas desde que se creó un registro, en 2003, Cruz ha puesto en valor la Ley andaluza contra la Violencia de Género, aprobada el pasado 18 de julio en el Parlamento de Andalucía, con la que se amplió la protección a las víctimas y se avanzó en prevención.
“Esta Ley, impulsada por el Gobierno de Susana Díaz y aprobada por el Pleno del Parlamento con la única abstención de Izquierda Unida, fue un texto pionero, por dar una vuelta de tuerca más al concepto de violencia de género, ampliándolo a las violencias fuera de la pareja o la ex pareja, protegiendo a las mujeres víctimas de feminicidios, acoso sexual, explotación sexual, matrimonio forzoso, mutilaciones genitales o crímenes en nombre del honor”, ha rememorado.
También ha destacado que, con esta Ley, “se amplió también el ámbito de la violencia de género, que pasó a abarcar, por ejemplo, la ciberviolencia, la violencia ejercida sobre los hijos e hijas u otras personas que dependan de la mujer víctima o la violencia ejercida a través de los medios de comunicación o la publicidad que utilicen la imagen de la mujer con carácter discriminatorio o vejatorio”.
“En tan sólo seis meses, hemos pasado de trabajar por un horizonte de paridad, de igualdad, de trabajar para erradicar la violencia de género y avanzar hacia una sociedad feminista, a escuchar expresiones como feminismo supremacista o mandamientos de la dictadura de género”, ha lamentado.
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