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El parlamentario autonómico por Almería y portavoz adjunto del Grupo Parlamentario Socialista Rodrigo Sánchez Haro, ha denunciado esta mañana la parálisis que existe en el nuevo Gobierno de la Junta de Andalucía. “Comprobamos con preocupación cómo los dos gobiernos, el del PP y el de Ciudadanos, tutelados por la ultraderecha de Vox, están paralizados desde el primer minuto”, ha lamentado Sánchez Haro y ha añadido que ni Moreno Bonilla ni Juan Marín “son capaces de determinar la estructura y los segundos niveles de su gobierno”. “Están demostrando ser unos auténticos incompetentes a la hora alguna medida de calado que mejore la calidad de vida de los andaluces y las andaluzas”, ha enfatizado.
Para el parlamentario del PSOE por Almería, PP y Ciudadanos, con la complicidad de Vox, “no están poniendo por delante los intereses de Andalucía y tampoco están situando las necesidades de los andaluces y andaluzas en el lugar que le corresponde” y ha asegurado que la Comunidad Autónoma “no puede permitirse el lujo de quedarse paralizada” siendo “muy grave” lo que está ocurriendo.
“Una comunidad que aglutina a más de ocho millones y medio de habitantes, no puede permitirse el lujo de detenerse ni un solo minuto, porque nos jugamos mucho en términos económicos, de prestigio y de confianza en los mercados comunitarios y extracomunitarios”, ha advertido Rodrigo Sánchez Haro.
Sin embargo, PP y Ciudadanos “en lugar de gobernar y de crear un ambiente de confianza en nuestra economía y en nuestros sectores productivos, siguen sin tomar decisiones, haciendo declaraciones populistas, en permanente campaña electoral”, ha censurado y esta inacción es fruto de que aún “no se han dado cuenta que tienen que gobernar, que ya no están en la oposición”.
Su única medida hasta ahora, ha recordado, “ha sido beneficiar a los ricos con el impuesto de sucesiones, una decisión que solo afecta a un 1% de la población andaluza”. Al contrario, de los Presupuestos andaluces, “de aquello que afecta al bienestar del cien por cien de los andaluces y andaluzas, no han dicho nada”, ha subrayado Sánchez Haro.
Si PP y Ciudadanos no presentan los presupuestos en marzo “supondrá un retroceso para nuestra comunidad sin precedentes” y sería “condenar a Andalucía y a Almería al ostracismo, como ya ocurrió en 2011 cuando llegó el PP al Gobierno de España”. Fueron, como ha recordado el parlamentario socialista, “siete años de olvido y traición a nuestra tierra”.
El portavoz adjunto del Grupo Parlamentario Socialista se ha preguntado qué va a ocurrir con las infraestructuras que están en marcha, con las obras que tenían que empezar en materia educativa, de carreteras y sanitaria. “¿Van a tapiar las puertas del hospital materno infantil en Almería como hicieron con los túneles de Sorbas para el AVE?”, ha reflexionado. “Conviene recordar también que hay muchos asuntos de calado que se tienen que resolver cuanto antes, como es el caso de los planes de empleo, que dejamos tramitados los socialistas y de los que se pueden beneficiar miles de andaluces y andaluzas, y que tienen que comenzar a gestionar cuanto antes los ayuntamientos”, ha exigido. Solo en Almería eso supone 21 millones de euros de inversión y más de 2.200 contratos, ha cifrado.
Comisión de Cultura Parlamento Andaluz
De otro lado, el PSOE le ha pedido al Partido Popular y a Ciudadanos “que den respuesta a la propuesta que los socialistas les hicimos para cambiar la presidencia de la Comisión de Cultura del Parlamento andaluz, que plantearon que recayera en manos de Vox, por la de Fomento”, ha solicitado Sánchez Haro y ha animado a estos partidos a pronunciarse “cuanto antes”.
Manifestación en Colón
En cuanto a la manifestación de la plaza de Colón en Madrid convocada por los partidos de la derecha española, para Sánchez Haro, es una muestra evidente de que “las derechas han comenzado ya la campaña electoral para las próximas elecciones”. “El de hoy, además, es un acto en el que compiten los tres gallitos de las derechas por ver quién se queda mandando en el gallinero”, ha asegurado y les ha acusado de llevar a cabo “una campaña de crispación sin precedentes”.
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