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Un total de 22 piezas fotográficas de diversos tamaños pretenden mostrar las emociones de sus autores en la exposición Mirando hacia adentro que el hall del Aulario IV acoge hasta el próximo 7 de junio. Son el reflejo y la materialización de los 10 participantes del taller fotografía para el autoconocimiento impartido por Elena Pedrosa de octubre de 2018 a enero de 2019. Este curso se encuentra dentro del amplio programa formativo que el Aula de Fotografía, coordinada por Blas Fuentes, organiza a través del Vicerrectorado de Cultura de la Universidad de Almería.
Elena Pedrosa, monitora del taller Fotografía para el autoconocimiento es doctora en Comunicación Audiovisual y se ha formado como Arteterapeurta Gestalt y Fototerapeuta. Este taller utiliza la fotografía como herramienta para aprender algunos aspectos internos de la persona y también sirve también para trabajar con personas que no son capaces de expresarse por escrito o verbalmente y utilizan la fotografía”, explica Pedrosa. Entre los participantes había psicólogos, trabajadores sociales o aficionados a la fotografía que querían expresarse a través de la fotografía. “El taller se centra en ver qué emociones podemos expresar con la fotografía, qué emociones podemos ver en la fotografía y por qué nos gustan determinadas fotografías e ir trabajando con esa excusa algunos aspectos indagando en lo que es la historia personal”.
A través de dos ejercicios los participantes han activado su inconsciente con la fotografía. “Son ejercicios en grupo o por parejas que ayudan a ser terapeutas y a utilizar la fotografía como herramienta en distintas terapias para ayudar a otras personas y a uno mismo”
Durante el curso, se ha abordado la exploración de estados emocionales, los vínculos y relaciones personales y en el grupo, la autoimagen y la proyección arquetípica en la sociedad, la narrativa fotográfica y el simbolismo de la imagen en la narrativa de vida o fotobiografía y la articulación de historias, huecos y revisión de patrones conductuales a través del álbum de fotos familiar.
Belén Cañadas, una de las participantes asegura que ha sido un taller muy terapéutico. “Pertenezco a una familia muy grande y me ha venido muy bien para trabajar ciertos aspectos. He reconocido ciertos vacíos y me ha servido para reforzar ciertos vínculos con algunos familiares y amigos. Con respecto al ejercicio del autorretrato, me ha parecido muy interesante trabajar con lo que opinan de ti y lo que tú piensas de ti mismo”.
Los diez participantes y alumnos del curso, Marisol Brunet, Belén Cañadas, Inmaculada Contreras, Marisol González, Rosario López, Rosa López, David Ortega, Rosario Padilla, Hilario Pastor y Lola Vizcaíno, tienen representación en esta muestra con un total de 22 piezas de diversos tamaños y temáticas.
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