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La cooperativa almeriense de primer grado, Vicasol, en su apuesta por mejorar la vida de las personas como una de sus señas de identidad, ha culminado su programa anual de actividades dirigidas a los pequeños de la casa para promocionar hábitos de vida saludables, con visitas de colegios, también visitando colegios, y colaborando con numerosas iniciativas como la reforestación de la Sierra de Gádor.
Vicasol lleva a cabo cada campaña una serie de acciones dentro de su programa de Responsabilidad Social Corporativa, centrado en tres objetivos fundamentales. Desde el punto de vista económico, a través de unas cuentas saneadas y transparentes. Desde el punto de vista medioambiental, cuidando del entorno en el que se desenvuelven sus actividades minimizando cualquier impacto negativo y maximizando la utilización de los recursos naturales. Y desde el punto de vista social, cuidando de las personas a través de la igualdad y el respeto por la diversidad a la vez que fomenta los hábitos de vida saludables.
La cooperativa almeriense, que conmemora en 2019 su 40 aniversario, ha clausurado el programa anual de actividades que lleva a cabo durante toda la campaña, al mismo tiempo que ha comenzado con las acciones que también impulsa cada verano: Colaborar con Escuelas de Verano para niños, ahora que los pequeños de la casa están en periodo vacacional e implantar la jornada laboral intensiva.
REFORESTACIÓN SIERRA DE GÁDOR
Cada año Vicasol diseña su programa anual de actividades dirigidas a los niños con el objetivo de crear conciencia medioambiental, y la necesidad de apostar por un modelo de vida saludable ya desde la infancia. Para ello la cooperativa colabora con diversas entidades, con las que desarrolla conjuntamente este programa.
Cada año Vicasol participa con el Colegio Federico García Lorca de Vícar en la reforestación de la Sierra de Gádor. El objetivo es atraer y retener más agua en los acuíferos subterráneos, y concienciar a sus alumnos de la importancia y respeto por el uso del agua.
Una docena de socios agricultores de Vicasol se han implicado también en esta actividad de manera personal. “Con la plantación de unos 500 árboles adaptados al clima se puede conseguir hasta un 30% más de capacidad. Ese incremento por unas 20 hectáreas proporcionaría la misma cantidad de agua que la desaladora del municipio cercano de Balerma” afirmaba Alberto Urea, el biólogo responsable de este proyecto Aldea, denominado Reforestación de la Sierra de Gádor para recuperar los acuíferos subterráneos de la Sierra de Dalías.
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