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El alcalde de Carboneras, José Luis Amérigo Fernández, ha mostrado su confianza en que el municipio pueda contar con una Oficina de Reactivación Económica, centrada en la captación de inversiones y puesta en marcha de proyectos que vengan a paliar las consecuencias del cierre de la central térmica de Endesa, especialmente en cuanto al empleo vinculado en la industria auxiliar del municipio, después de que todos los grupos políticos representados en la institución provincial hayan respaldado una declaración institucional de apoyo a la localidad. Esta declaración, que cuenta con hasta 15 acuerdos en los que se desarrollan medidas a adoptar por parte del Gobierno de España, la Junta de Andalucía y la Diputación Provincial, llega tras las demandas por parte del alcalde carbonero de acciones concretas al conjunto de administraciones.
En ese sentido, Amérigo Fernández ha explicado que en la última reunión celebrada por la Asociación Nacional de Municipios por una Transición Energética Justa “se puso sobre la mesa la conveniencia de contar con Oficinas de Reactivación Económica, una iniciativa en la que las localidades afectadas en la provincia de La Coruña ya vienen trabajando”. Para eso, ha continuado, “el gobierno autonómico y el provincial han de ir de la mano y poner los medios humanos y técnicos necesarios de cara a disponer de equipos expertos que se centren en la búsqueda e implementación de nuevas actividades e iniciativas empresariales que generen empleo y riqueza en Carboneras”.
“Se tienen que garantizar los 500 empleos, aproximadamente, vinculados a la central térmica. Y se tienen que garantizar cuanto antes porque la mayoría de ellos son de industrias auxiliares en las que sus trabajadores ya se están viendo afectados”, ha resaltado. Carboneras, ha continuado, “es el único municipio de la provincia perjudicado y aquí es donde se tienen que concentrar los esfuerzos y las actuaciones que se diseñen por parte de todas las administraciones y de la propia Endesa”.
Un reto de todos
En ese sentido, ha puesto el foco en que tanto el Gobierno andaluz como el de España “tienen que impulsar con agilidad en nuestro pueblo las inversiones necesarias, con cargo a sus presupuestos para 2020, para aumentar los servicios públicos y atraer inversión, para contribuir a la creación de puestos de trabajo y para mejorar la calidad de vida de los vecinos”. Así se recoge en una declaración institucional que pide también, como viene haciendo el Ayuntamiento carbonero, que esas dos administraciones aprueben un plan de empleo específico para la localidad.
Una iniciativa que, para José Luis Amérigo Fernández, “tiene que enmarcarse dentro de un ambicioso Plan de Reactivación elaborado por parte del Gobierno de España y de la Junta de Andalucía, en el que se incluya un calendario concreto de actuaciones y con presupuesto adecuado para ejecutar cada una de ellas”. Y que, además,“tenga también como meta la declaración de Carboneras como Municipio Turístico por parte de la Junta de Andalucía, fomentando nuestro potencial en ese apartado”.
“Sabemos que el reto que tenemos por delante no va a ser fácil y que para poder superarlo con éxito necesitamos de la implicación y esfuerzo de todos los gobiernos”, ha remarcado. Pero, por parte del Ayuntamiento, “estamos haciendo lo que nos corresponde dentro de nuestras competencias para conseguirlo y, además, hemos puesto sobre la mesa de las diferentes administraciones el itinerario a seguir en beneficio de los vecinos de Carboneras y del futuro del municipio”.
Situación actual
Endesa solicitó el pasado 27 de diciembre al Gobierno de España el cierre de la Central Térmica de Carboneras, que emplea a unos 500 trabajadores y trabajadoras de la localidad de modo directo e indirecto, además de aportar casi 3 millones anuales a los presupuestos municipales.
El Acuerdo de París de la Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP21) señala como objetivo conseguir un sistema energético totalmente descarbonificado en el año 2050, pero partiendo de medidas para una transición justa hacia ese modelo. “Está claro que no se puede ir hacia adelante medioambientalmente dejando atrás a la gente y a los pueblos que tienen en el carbón su sustento fundamental”, ha defendido Amérigo Fernández.
Por parte de Endesa se ha presentado para cada planta afectada un proyecto de actuaciones para tratar de atenuar el impacto provocado por los cierres. Dentro de ese compromiso, bajo el plan Futur-E, se respetarán los puestos de trabajo de los empleados de la plantilla en Carboneras; se priorizará la contratación de personas del entorno para el desarrollo de nuevas instalaciones renovables, que el Consistorio reclama que sean creadas en Carboneras, y se ha activado la búsqueda de alternativas empresariales en las actuales instalaciones con un concurso de ideas y proyectos.
En cuanto al Gobierno de España, cabe destacar que desde el Ayuntamiento de Carboneras están a la espera de una reunión con el Ministerio para la Transición Ecológica en la que los municipios españoles afectados por los cierres quieren realizar aportaciones a la línea de incentivos planteada para las entidades locales, que cuenta con una dotación económica de alrededor de 7 millones de euros.
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