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Alfaralmería está poniendo en valor el trabajo de los artesanos del barro con múltiples actividades. Las jaimas donde los 27 artesanos procedentes de España, Portugal y Francia muestran sus piezas para que almerienses y turistas puedan comprarlas es el eje central de la Feria, pero también hay talleres infantiles, la presentación de dos documentales y el séptimo concurso entre los alfareros que hoy se ha fallado.
El concejal de Cultura, Diego Cruz, ha entregado los premios a los ganadores. El primero, Marcial Carrasco Díaz, de Cerámica Abad, de Puente del Arzobispo, cuyo proceso creativo ha sido declarado por la Unesco patrimonio inmaterial de la humanidad, que ha realizado una parra de dos asas con tapa, preciosa, pintada con animales del bosque y que está llena de detalles.
En segundo lugar un almeriense procedente de la barriada de Cabo de Gata. Óscar Aguilella Mediano, que se estrenaba en Alfaralmería, ha realizado una vasija cocida con un complejo proceso de cristalización. Tercer puesto para Rosa María Playá Pérez, de Cerámicas Playá, de Lorca, con un delicado jarrón decorado con flores en relieve.
El concejal de Cultura destaca “la relevancia de conservar y promocionar la alfarería, un trabajo artesanal que realizan estos artistas con sus manos, y que nos enseña la historia y costumbres de cada pueblo, además de tener una gran belleza estética. Para el Ayuntamiento, Alfaralmería es uno de los eventos más relevantes de #AlmeríaenFeria”.
Marcial Carrasco explica su obra: “la parra se usaba antiguamente para curar los embutidos, y ahora es decorativa. Todas las piezas son a mano, en barro cocido, que se esmalta, la decoramos, y la metemos en horno otra vez. Los motivos suelen ser de caza, pues es una costumbre de la zona, y el color es el verde cobre tradicional de Puente del Arzobispo”.
Óscar Aguilella afirma que “es una vasija hecha en torno, cocido a 1300 grados de temperatura. La complejidad está en la técnica de cristalización, que se produce en la segunda cocción, a 1100 grados, donde juega un papel fundamental el ciclo de cocción y saber ajustar las fórmulas de manera sostenida para que crezcan los cristales formados con oxido de zinc”.
Por último, Rosa María Playá indica que “he querido hacer algo diferente, en una línea que presentamos en primicia y queremos desarrollar. Haces la base y después las flores las colocas hoja a hoja, lo pintas, y realizas una segunda cocción”.
Un total de 27 alfareros
La 31ª Feria de Alfarería de Almería ‘Alfaralmería’ se distribuye a lo largo de 29 jaimas en un espacio entoldado en la Rambla, donde participan 27 alfareros (crean piezas de barro) y ceramistas (además de crearlas, pintan y decoran las piezas), una para talleres y una última para la exposición del concurso que se celebra entre los artesanos. Los participantes proceden de cunas de este oficio, como Talavera de la Reina (Toledo), Puente del Arzobispo (Toledo) o Salvatierra de los Barros (Badajoz).
En global, hay una amplia representación de la geografía española: Jaén, Córdoba, Murcia, Albacete, Ciudad Real, Badajoz, Cáceres, Toledo, Castellón, Salamanca y Zamora, además de un profesional de Francia y tres representantes de Portugal. Y, por supuesto, los artesanos de la provincia. Almería está representada por cuatro artesanos: Alfarería y Cerámica Robles, Alfarería Colella López, Óscar Aguilella Mediano, y Antonio Flores Ceramista.
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