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Las basuras marinas se plantean hoy día como uno de los mayores problemas ambientales a nivel mundial, de complejísima actuación y gravísimas consecuencias para los ecosistemas marinos, las actividades socio-económicas del hombre vinculadas con los mismos y nuestra salud como especie.
En el camino y objetivo de enfrentar esta problemática y revertir la situación, un grupo de voluntarios de diversas edades ha participado, ayer viernes y hoy sábado, en la capital en el evento “1m2 contra la basuraleza”, como parte del Proyecto Libera, una iniciativa de Ecoembes y Objetivo Newen, a la que se han sumado el Ayuntamiento de Almería en la persona de la alcaldesa, María del Mar Vázquez, junto a la empresa Entorno Urbano, concesionaria del servicio de limpieza de la capital, y la Universidad de Almería
Vázquez, acompañada del concejal de Sostenibilidad Medioambiental y Energética, Antonio Urdiales, ha visitado el puesto itinerante que esta iniciativa ha situado hoy en la playa de La Térmica, desde donde se ha coordinado la recogida de residuos que incluye esta campaña, felicitada por la regidora “y que hace suya el Ayuntamiento en su apuesta de seguir concienciando a los ciudadanos de la importancia de cuidar nuestro entorno marino y mantener limpias nuestras playas, algo fundamental para conservar las especies y proteger el medioambiente. Desde las entidades locales debemos apostar por la conservación de nuestros ecosistemas, y en Almería nuestra vinculación con el litoral y los servicios que nos ofrece es muy importante”, ha subrayado.
La alcaldesa ha destacado el carácter medioambiental y educativo que tiene esta iniciativa explicando que la recogida de pequeño residuo (restos de juguete, colillas de cigarros, plásticos…) se utiliza posteriormente para confeccionar artículos que, en forma de trueque, se entregan en forma de premio a los participantes. Muestra del trabajo que se realiza a través de esta campaña es el ecomercado y el museo de residuos expuestos en la carpa habilitada en la playa, todo un ejemplo del tipo de residuo que generamos y que aflora gracias a iniciativas como esta.
“Esta campaña es mucho más que limpiar de residuos las playas”, argumenta Mónica Motos, licenciada en Medioambiente y coordinadora de esta iniciativa, en marcha desde 2017 y que ha llegado por vez primera a las playas de la capital.
“La cantidad y de pequeño residuo que se saca de la playa, entre diez y veinticinco kilos, depende de su tipología e idiosincrasia; si es una playa más urbana, si es una playa más familiar que turística, si sobre ella hay asentadas chiringuitos, zonas deportivas… Pero en todos los casos estamos hablando de miles y miles de pequeños fragmentos, de menos de quince centímetros, recogidos minuciosamente, fragmentos que luego estudiamos, convirtiendo esta iniciativa en un programa de educación ambiental”, ha explicado Motos, agradeciendo la implicación y colaboración del Ayuntamiento de Almería, así como de la Universidad de Almería, en la personas de Javier Cabello, Catedrático de la UAL del departamento de Biología y Geología.
‘Mi Playa Bonica’
Todo el residuo extraído de esta iniciativa es incorporado al programa provincial de investigación ‘Mi Playa Bonica’, donde una parte de esta se realiza en los Centros de Educación Secundaria. El objetivo de esta parte del proyecto pasa por “involucrar a los jóvenes sobre las problemáticas ambientales de su municipio, junto a la oportunidad de escuchar sus aportaciones y propuestas de políticas de conservación y gestión de los ecosistemas del litoral, propuestas algunas muy interesantes que además premiamos a través de esta iniciativa”, ha subrayado Motos.
Concienciación, participación, educación, divulgación e investigación, en suma, se dan la mano en esta interesante iniciativa que desde el Ayuntamiento se quiere seguir apoyando en el objetivo común de la mejora de nuestro entorno y preservar el patrimonio para las generaciones futuras.
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