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El Partido Popular de Almería se ha empeñado tanto en retorcer la realidad y buscar la confrontación como estrategia política que ha terminado perdiendo toda la credibilidad que en algún momento atesoró, supongo, para ganarse la confianza de los almerienses. En esa táctica, perversa y desmesurada, está utilizando además la Diputación provincial o el Ayuntamiento de la capital como las auténticas y genuinas sedes del PP, faltando al respeto de esta manera a todos los almerienses: a los que les votaron y a los que no lo hicieron.
Muy pocas ideas, ni buenas ni malas, nacen en la sede de la derecha en el Paseo de Almería, pero las más retorcidas, sin duda, sí son fácilmente reconocibles entre los despachos de los que representan a esas instituciones. Los ejemplos de esto que está ocurriendo son numerosos, sin embargo me voy a detener en la reiterada búsqueda del cuerpo a cuerpo que se está promoviendo con los servicios sociales.
Desde la Diputación se insiste de manera torticera y miserable en desviar la atención de quien verdaderamente se ha encargado de asestar un golpe mortal a la Ley Dependencia, haciéndola inaccesible para mucha gente decreto tras decreto. El Gobierno de Rajoy ha rebajado su aportación hasta tal punto que la Junta tiene que hacer frente al 72% de la financiación. De esto no dice nada el PP, solo de si la Junta tiene que hacer frente a algún pago, a pesar de que ese dinero se esté abonando escrupulosamente.
En ese contexto de castigo a los dependientes, Andalucía ha dejado de recibir en solo dos años 314 millones de euros al reducir su aportación el Ejecutivo central del 50% al 28%. Esta despiadada política contra los más vulnerables ha ocasionado también un perverso efecto indirecto sobre miles de personas que se han visto afectadas en Andalucía por la eliminación de la cotización a la seguridad social de las cuidadoras y cuidadores en el entorno familiar. A pesar de ello, la aportación económica que realiza el Gobierno andaluz para estos servicios superó durante 2013 los 100 millones de euros en nuestra provincia. Pero es más, la Junta reforzará esa atención a la dependencia durante este año con una aportación extra de más de 850 mil euros, que se distribuirán entre la Diputación Provincial de Almería y los seis municipios con más de 20.000 habitantes.
El compromiso del Gobierno andaluz se traduce en un nuevo esfuerzo para garantizar la tasa de reposición y el incremento paulatino del número de beneficiarios de la Ley de la Dependencia. De esta manera, el objetivo que se persigue es llegar a la cobertura de años anteriores, mientras que desde las filas del PP buscan incansablemente acabar con este derecho.
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