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La Empresa Pública de Emergencias Sanitarias 061 ha organizado en Almería unas jornadas de formación destinadas a enseñar técnicas de reanimación cardiopulmonar a 160 miembros de la Guardia Civil de la provincia. El contenido de estos cursos está dirigido a preparar a los alumnos para prevenir la muerte súbita cardiaca, valorar la situación de la víctima, alertar al 061 y efectuar el masaje cardiaco mientras acuden los servicios sanitarios de emergencias.
Las sesiones de formación se ha llevado cabo durante los días 12 y 13 de junio en la Comandancia de la Guardia Civil de Almería y han contado con la presencia del delegado territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, Alfredo Valdivia. Los participantes, a través de talleres prácticos con una duración total de 3 horas presenciales, han podido conocer cómo actuar ante situaciones de emergencias en las que existe riesgo para la vida de las personas, centrándose en técnicas de reanimación cardiopulmonar y el manejo de la vía aérea. Además, se han formado también en técnicas de desobstrucción en caso de atragantamiento, así como de movilización e inmovilización en caso de crisis.
Los cursos, con una media de 80 guardias civiles por cada uno de ellos, permitirán a los agentes socorrer a sus propios compañeros en caso de emergencia en lugares remotos o formando parte de misiones internacionales, así como a ciudadanos que se encuentren bajo custodia policial (detenidos, etcétera).
Estas jornadas se integran dentro del programa de formación de primeros intervinientes que viene desarrollando la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias, dirigido a miembros de los servicios contra incendio y salvamento, las fuerzas y cuerpos de seguridad y los equipos especiales de rescate y catástrofe, con el objetivo de coordinar la actuación entre las diferentes instituciones en situaciones de emergencias individuales y catástrofes.
Cadena de supervivencia
La secuencia de actuaciones que determinan un aumento de la supervivencia tras sufrir una Parada Cardiorrespiratoria (PCR), vienen descritas en lo que se ha llamado la ‘Cadena de Supervivencia’.
Esta cadena consta de cuatro eslabones bien diferenciados y todos a su vez imprescindibles, con una secuencia que comienza, en primer lugar, con la necesidad de alertar de forma inmediata al servicio de emergencias sanitarias (061); en segundo lugar, el inicio precoz de las maniobras de reanimación cardiopulmonar básica, hasta que llegue el equipo sanitario; en tercer lugar, la desfibrilación precoz, que se refiere al tratamiento eléctrico de la arritmia que ha producido la parada cardiaca, en el caso de disponer de este sistema; y en cuarto lugar, la asistencia y traslado al hospital por un equipo de emergencias sanitarias.
Ya que la mayoría de las personas que sufren una parada cardiaca se encuentran en el domicilio (75%) y espacios públicos (16%), y estas situaciones son presenciadas por un testigo hasta en el 60% de las ocasiones, se hace imprescindible establecer una estrategia de formación en maniobras básicas de reanimación cardiopulmonar para asegurar los dos primeros eslabones de la cadena y por tanto mejorar la supervivencia de los pacientes que han sufrido un episodio de estas características, mediante el entrenamiento del personal no sanitario en el manejo inicial de estas situaciones.
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