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Cuatro de cada diez autónomos andaluces considera que 2014 ha sido un año complicado y que la situación económica ha sido negativa para su negocio. Así lo refleja el último Barómetro de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), en el que se recogen los principales problemas que enfrenta este colectivo. Así, la disminución del volumen de trabajo ha sido para uno de cada dos autónomos andaluces concretamente para el 58,3% la principal causa de la disminución de su negocio; el 19,6% de los autónomos considera que el empeoramiento ha venido motivado por los impagos de los clientes y el 12,8% lo atribuye a la imposibilidad de acceder al crédito.
La crisis que ha azotado a la economía española en los últimos años ha obligado a miles de trabajadores a embarcarse en el trabajo autónomo. Sólo durante 2014, en la provincia de Almería el número de afiliados a la Seguridad Social con este régimen creció un 2,7%, hasta situar el total en 54.429 personas.
El trabajo autónomo ha sido y es una pieza fundamental para la dinamización de la economía andaluza. El Gobierno de Susana Díaz es consciente de ello, como también lo es de la importantísima contribución que realizan estos trabajadores a la generación de riqueza, bienestar social y empleo.
El empleo autónomo es prioritario para el Gobierno Andaluz. Por ello, dentro del paquete de medidas que está poniendo en marcha el Gobierno de Susana Díaz para la recuperación del empleo, se ha incluido también un Plan de actuación para autónomos que estará dotado con 100 millones de euros.
Este Plan de actuación incluirá medidas de apoyo a la creación de nuevas empresas y consolidación de las existentes, mediante programas de incentivos públicos y apoyo a la financiación; ayudas para la creación de empleo y formación; servicios de orientación a los emprendedores, como acceso a las incubadoras de empresas, así como la mejora de la regulación y simplificación administrativa. Asimismo, también contemplará medidas para impulsar el emprendimiento en el mundo rural.
Tras conocer los detalles de esta iniciativa, las propias asociaciones de autónomos han valorado el compromiso de la presidenta andaluza con el colectivo y la oferta que se les ha hecho de colaborar, a través de la aportación de medidas concretas que puedan ser incluidas en el Plan.
La importancia de los autónomos dentro del sistema económico andaluz y el esfuerzo que han hecho estos trabajadores por el mantenimiento del empleo en los años de crisis merecen la puesta en marcha de medidas concretas destinadas a mejorar la situación del sector, como ya se ha hecho con otros grupos de población, a través de planes como el Emple@ Joven y el Empleo 30+, que han generado ya más de 40.000 empleos en la comunidad autónoma andaluza. A estas medidas, el Gobierno andaluz también va a añadir dos nuevos planes: uno para la inserción laboral de los parados mayores de 45 años y otro para el de retorno del talento joven a Andalucía.
El programa para los parados de más de 45 años contemplará incentivos para las empresas que realicen contratos indefinidos a personas de esta franja de edad, con un compromiso de permanencia de al menos un año.
Sobre el programa de retorno del talento joven a Andalucía, se primará, a la hora de conceder incentivos, a aquellas empresas que se comprometan a contratar a jóvenes investigadores andaluces que actualmente están fuera de la comunidad.
Con estas estas medidas, se busca dar un impulso al mercado de trabajo, para acabar con unas cifras de paro que siguen siendo intolerables. Éste es el principal objetivo del Gobierno andaluz, que está luchando contra el desempleo en solitario, ya que las administraciones gobernadas por el PP siguen mirando para otro lado. Con cifras de parados como las conocidas esta semana, que hablaban de un repunte del paro en la provincia durante enero de más de dos mil personas, uno se pregunta qué más tiene que pasar para que el Gobierno de Rajoy decida sumar, en vez de restar, y apruebe un plan de empleo para Andalucía.
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