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Susana Artes
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Creo que muchos almerienses se habrán preguntado lo que yo al leer las ansiosas respuestas por parte del PP de la provincia almeriense (incluido el alcalde de la capital, cómo no): ¿Es casualidad o causalidad que los alcaldes populares saquen las antenas, de cuajo, ante el patinazo de Ciudadanos a propósito del AVE? ¿Acaso sacan esas antenas en algún momento para 'defenderlo' y 'agilizarlo'? Yo creo que no...en absoluto.
Hablando de sacar antenas, hace escasos días fue presentada la lista del PP para las municipales como algo ¿Sorprendente? A ver si alguien ha querido decir 'Permanente'. Yo creo que va a ser eso, pues no sé a quién va a sorprender ese listado (quitando a dos o tres caras nuevas).
Como no sea que sorprenda a alguna que otra pobre persona ignorante o asimismos, no me lo explico.
Pero es así, las 'mismas' caras cambiadas de orden y de institución en varios casos (se dice que el orden de los factores no afecta al resultado...).
Y es que estamos ante un partido que ni cambia, ni sabe ya qué hacer para captar votos. Se remueven vivos por recabarlos. La otra vez hablé de uno de los últimos jueguecicos, el mareo del sector regionalista. Ahora parece que dan por hecho que se les acaba el turrón (o cortijo) y estudian posibles pactos. Eso tras demostrar la falta de gestión durante cuatro añazos de no hacer prácticamente nada por la capital.
¿Sorprendente? Tan 'previsible' como siempre...
Y es normal para un partido político que está llegando a su nivel más crítico con militantes, simpatizantes o votantes 'centralistas' que salen deprisa y corriendo hacia otras formaciones cómo Ciudadanos, UPyD (ahora, en buena parte, de traspaso), e incluso el PSOE como ejemplos. Un partido con un caos interno que ni los suyos, los de siempre, saben solventar. Y un partido que ha llegado a, permítanme, tal extremismo que ni los suyos lo aguantan.
Me recuerdan al Titanic. Quizás les ha tocado ser los violinistas y, como ellos, ni se han enterado aún de que su barco se fragmenta y se hunde a la velocidad del AVE en el oceano político.
¿Sorprendente?
Evidente...
Susana Artes
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