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Este viernes pasado, el Consejo de Ministros consumó lo que venía gestando desde el principio de la legislatura con varios borradoresla aprobación del Real Decreto sobre autoconsumo energético in extremisa 70 días de las generales en contra de todos y de todo (salvo al oligopolio eléctrico de UNESA). El mismo día fue tema del momento #NosRobanElSol en twitter durante horas, en Avaaz se han recogido casi 200.000 firmas, más de 40.000 alegaciones, el 27 de julio firmaron los 18 partidos de la oposición un manifiesto donde se comprometían a derogarlo si se aprobaba, a los que se sumaron sindicatos, las asociaciones empresariales del sector, y las cinco grandes organizaciones ecologistas.
Entre las razones de este rechazo frontal destacan las trabas administrativas, inseguridad sobre el marco de retribución, la no regulación del balance neto, la prohibición de compartir la electricidad o crear comunidades energéticas y especialmente la implantación de una tasa, en borradores anteriores peaje de respaldo, que ha merecido el nombre de impuesto al sol para aquellos que quieran producir su propia energía estando conectados a la red. Todo esto ha merecidouna valoración negativa acompañado de algunos calificativos durante los últimos tiempos por parte de la prensa nacional y extranjera: lamentable, perjudica, asfixia, penaliza, ridículo, esperpéntico, bochornoso,inexplicable, guerra, seísmo, nacido para morir, condenado al fracaso, robo, atraco, prevaricación, al servicio de las eléctricas, etc.
Los ciudadanos de Almería disfrutan el clima de la provincia con más horas de sol de toda España y Europa con casi tres mil horas al año. Penalizar con una tasa única en el mundo el poder utilizar el sol para producir tu propia energía resulta perder una oportunidad para el ahorro y negar la soberanía, libertad y el derecho al autoconsumo que en la mayoría de los países europeos es fomentando con beneficios fiscales, con ayudas, etc.
Los ciudadanos de Almería están orgullosos de la capacidad de innovación y emprendimiento de sus gentes. Obstaculizar con trabas administrativas y las normativas contrarias a las renovables en los últimos años ha provocado en nuestra provincia el cierre de la mitad de las empresas del sector, la cancelación de decenas de proyectos con presupuestos millonarios y el retraimiento de muchos consumidores que se hubiesen subido al carro del autoconsumo. En resumen, miles de puestos de trabajo en la provincia que hubiesen sido cuanto menos una parte de la solución al problema de la crisis y motor del desarrollo.
Los ciudadanos de Almería quieren un futuro que no éste amenazado por el cambio climático que se deja sentir sobremanera en la escasez de agua y modelo de producción basado en combustibles fósiles.Seguir apostando por el petróleo, gas, uranio o carbón, supone un gasto en importaciones de más de 40.000 millones de euros todos los años y un riesgo al confiar en estas fuentes de energía en declive por agotamiento y por causantes del cambio climático. Mientras España, y Almería especialmente, lo que tiene es viento y sol.
El autoconsumo energético es rentable y competitivo frente a las energías sucias, promueve el desarrollo de la economía local y el empleo, resulta un pilar fundamental para la soberanía y la transición hacia un nuevo modelo energético, renovable, distribuido, eficiente y democrático.
El Real Decreto no solo va en contra de los ciudadanos y del sentido común también de varias directivas europeas (2009/28/CE de renovables y 2012/27/UE de eficiencia energética)que más tarde o temprano y tras su denuncia, le augura un corto recorrido. Decía Lincoln que "La democracia es el gobierno de la gente, por la gente, para la gente.".¿En quién habrá pensado este gobierno cuando ha aprobado este Real Decreto sobre autoconsumo? En la gente y en los ciudadanos de Almería, no.
Juan Sebastián Fernández Prados
Miembro de la Plataforma por un Nuevo Modelo Energético y EQUO Almería
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