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La viceportavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Almería, Carmen Núñez, ha exigido al gobierno municipal del Partido Popular “que actúe con seriedad y se ponga manos a la obra para implantar, de manera progresiva, las medidas que han sido acordadas dentro de la Mesa del Ruido”.
Núñez ha trasladado el respaldo de los socialistas a los colectivos que han requerido al gobierno municipal que trabaje en este asunto, entre los que se encuentra la Asociación de Vecinos Casco Histórico, que durante el último pleno ordinario reclamó que se inicien las actuaciones correspondientes por parte del Ayuntamiento.
En ese sentido, ha defendido el trabajo que se ha realizado por los integrantes de la Mesa del Ruido, cuya constitución fue propuesta por el Grupo Socialista, y que se ha concretado en el acuerdo por parte de todos los participantes -entre los que se encuentran residentes y hosteleros- de que es necesario, para comenzar, la puesta en marcha de una campaña de concienciación que incluya carteles en las puertas de todos los bares pidiendo respeto al descanso de los vecinos, además de un mayor control municipal.
A esa iniciativa se suma el control del número de mesas en terrazas; la realización de mediciones para documentar lo que está ocurriendo en zonas críticas o la elaboración de un plan zonal, que visualice cómo está la situación por áreas y que, según han valorado desde el PSOE, “los propios residentes, entre los que se encuentran técnicos, se han ofrecido a elaborar para el Ayuntamiento si fuera necesario”.
La viceportavoz socialista ha explicado que junto a esas iniciativas existen otras “que necesitan seguir siendo trabajadas para alcanzar mayores puntos de acuerdo” dentro de la Mesa que, según ha resaltado, “debe de seguir manteniéndose activa como un instrumento de participación y de diálogo, además de como un espacio en el que alcanzar consensos que resultan fundamentales en un asunto trascendental”.
Dentro de esa línea, Carmen Núñez ha concluido resaltando que el gobierno municipal “tiene la obligación de buscar soluciones consensuadas y equilibradas en este tema para todas las partes implicadas” ya que, sin duda, “eso beneficiará a residentes y hosteleros, pero también a la imagen que traslada la capital como una ciudad sostenible y habitable, que vela por compatibilizar el descanso y las actividades de ocio que favorecen al turismo, a los servicios y la creación de empleo”.
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