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Estos últimos días hemos asistido a otro temporal que ha causado multitud de daños materiales. Pero también ha traído una consecuencia de alto impacto visual, económico y ecológico, como son los residuos plásticos agrícolas, basuras urbanas y materiales de construcción que son abandonados en los cauces de las ramblas ante la pasividad de las Administraciones, la falta de conocimiento de la ciudadanía y la poca educación de los desaprensivos que lo realizan sabiendo qué consecuencias conlleva. Por ello, Ecologistas en Acción de Roquetas de Mar pide a las autoridades que no consideren estas prácticas habituales como algo puntual que hay que remediar con limpiezas.
Para el grupo ecologista ,“llevamos tiempo intentando concienciar a la ciudadanía de nuestro municipio de las consecuencias de este tipo de acciones que son costosas y dañan severamente el medioambiente”. Por ello Rocío Jiménez, coordinadora local de Ecologistas en Acción, avisa que “más allá de lo que se ve en nuestras playas, es preocupante lo que se quedará en el medio marino” y continúa “y es este medio (marino) una fuente de vida necesaria que hay que proteger y cuidar, y de la cual nos alimentamos”.
Regularmente, desde el grupo de Ecologistas en Acción de Roquetas de Mar, se encargan de realizar limpiezas en las ramblas, especialmente en las que transcurren por la zona de La Ribera de la Algaida para preservar ese espacio, muy afectado por este tipo de basuras. A pesar de ello, hay circunstancias y realidades que se escapan a sus capacidades y recursos y que preocupan considerablemente a este colectivo.
Dice la coordinadora local que “hemos presentado escrito al Ayuntamiento y nos han comunicado la intención de tener en cuenta nuestra solicitud de vigilancia y, en la medida de sus posibilidades, de limpieza; también nos gustaría saber si existe, por parte de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía de algún protocolo, medida establecida u orden de mantenimiento de las canalizaciones de las ramblas.”
Destacan que “por desgracia, cuando se habla de limpieza de cauces se refieren a la eliminación de vegetación”, resultando que se eliminan de las ramblas aquellas herramientas naturales que trabajan de forma eficaz en la laminación del agua y, como consecuencia, de los menores problemas en las avenidas. Solicitan la restauración con criterios ecológicos de todas las cuencas afectadas, empezando por los cauces; sustituir progresivamente los encauzamientos por bosques de ribera allí donde sea posible; permeabilización de los paseos marítimos, tanto para los seres vivos como para el agua; creación y mantenimiento adecuado de una red de canalizaciones y alcantarillado en las calles de los pueblos que carezcan de él; acabar definitivamente con los residuos de los invernaderos y realizar una correcta gestión de los plásticos para que no acaben en los ríos, el mar o la atmósfera por mala praxis o accidente. De llevarse a cabo, todas estas medidas no sólo tendrían unas indudables ventajas ambientales, sino también económicas y sociales por la creación de empleo que supondrían, la obtención y desarrollo de nuevos productos y servicios, y la reducción de los costes derivados de una débil resiliencia frente a fenómenos ambientales más o menos extremos que puedan darse en el futuro.
No obstante, desde Ecologistas en Acción se van a seguir realizando actividades de limpieza y concienciación ciudadana e instan a todos los Ayuntamientos por cuyos territorios transcurren estas ramblas que se convierten en vertederos ilegales a que actúen en todas las vertientes del problema, desde la educación e información hasta la sanción y limpieza.
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