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JOSÉ ANTONIO FERNÁNDEZ, Presidente de FERAL
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La Federación de Regantes de Almería FERAL celebra hoy, 22 de marzo, el Día Mundial del Agua con un acto en Vícar donde se conmemora el 50 aniversario de la instalación del riego por goteo y con un reconocimiento a los agricultores y al esfuerzo diario que se realiza en toda la provincia. Todo ello en una situación actual donde la sequía y el alza en los costes de producción están suponiendo una grave amenaza para los regantes.
Este año, la Federación de Regantes de Almería ha elegido como lema conmemorativo “El agua es vida, cuídala” para destacar la importancia que tiene a nivel global y, en particular, en la economía de la provincia el agua.
El esfuerzo del agricultor y de sus familias también toman protagonismo en esta fecha. Esa “agricultura familiar” almeriense que ha ido superando, con esfuerzo y tesón, los retos que se les han presentando. Hay que recordar qué cuatro grandes hitos marcan el desarrollo del campo almeriense. Primero, utilizar la tecnología para buscar pozos en profundidad y aplicar los sistemas de motobombas sumergibles para conseguir agua de riego, todo ello con el enarenado en los años cincuenta del siglo pasado y, posteriormente, levantando invernaderos apenas una década después y complementando ambos avances, haciendo así extensivo la creación de los “cultivos de primor” tan característicos de nuestra provincia y por último, la llegada del riego por goteo hace poco más de cincuenta años.
En ese tiempo, la agricultura de Almería ha ido avanzando y mejorando los sistemas de filtraje, la forma de abonar la tierra, se revolucionó con la llegada de los primeros automatismos, los programadores de riego y, posteriormente, la instalación de los sensores de riego que te indican el agua que te hace falta en cada momento para el crecimiento adecuado de cada planta.
Sin duda, el riego de precisión ya es una realidad en el campo almeriense. Aportamos con una tecnología puntera, las necesidades de la planta sin desperdiciar ni una sola gota de agua.
Además de ese reconocimiento a la agricultura familiar, a sus avances y a la aplicación de las nuevas tecnologías, hoy recordamos que las reivindicaciones de FERAL y la Mesa del Agua de Almería reclamando al Gobierno de España que estableciera “con carácter de urgencia” un precio máximo de 30 céntimos para el agua desalada con destino a riego, tal y como recoge la disposición adicional cuarta de la Ley 1/2018 de 6 de marzo, han sido atendidas. Esa disposición adicional, en vigor desde el 7 de marzo de 2018, recoge textualmente que “el Gobierno habilitará los mecanismos de subvención necesarios a fin de que el precio del agua desalada para riego no exceda los 0,30 euros por metro cúbico”.
Y hace unos días, el Gobierno de España ha aprobado un decreto ley por el que se fija en 0,45 euros el metro cúbico de agua desalada en toma de riego, una propuesta que “es asumible para nuestro modelo agrícola” ya que en algunas zonas de la provincia, concretamente en el Levante y Almanzora se ha llegado a pagar más de dos euros por metro cúbico hace unas semanas”, ha recordado el presidente de FERAL, José Antonio Fernández. Que también ha destacado que las gestiones llevadas a cabo por la Federación de Regantes y por la Mesa del Agua de Almería ante el Gobierno de España en particular, y ante el resto de administraciones públicas competentes en esta materia, en defensa de un precio justo “han sido por fin atendidas”.
La sequía y las necesidades hídricas. 180 hectómetros cúbicos de agua desalada para riego
Vivimos unas fechas de sequía. Este hecho, al margen de la falta de agua, provoca que las conductividades de las aguas subterráneas en las masas de agua suban de manera considerable y que haga muy difícil su utilización para el riego. No son solo dos problemas que los regantes de Almería afrontan ahora. También nos hemos encontrado con que el trasvase desde el Negratín no llega al Almanzora ante la falta de agua. Y seguimos diciendo que la cantidad destinada a nuestra provincia del trasvase Tajo-Segura es imprescindible para toda la Comarca.
No podemos dejar de recordar las necesidades hídricas de la provincia en cuanto al agua desalada se refiere y como siempre hemos hecho desde FERAL, defendemos la llegada de agua por ejemplo, desde la presa de Rules. Una vez atendidas las necesidades de la provincia de Granada, los excedentes de la presa de Rules deben llegar al Subsistema IV de Sierra Nevada que incluye a la Comarca del Poniente almeriense. Igualmente, creemos muy necesaria la finalización de la denominada ‘Autovía del agua’ de la provincia de Almería que interconectaría todas las comarcas y que serviría para poder mejorando en eficiencia y gestión solventando los problemas de abastecimiento que pudieran surgir en cualquier punto de la provincia.
La necesidad de la provincia de Almería, en cuanto al agua desalada, se estima en que hay que realizar las mejoras e infraestructuras necesarias para alcanzar una producción de 180 hectómetros cúbicos. Llegando hasta los 50 en la Comarca del Almanzora (con los 20 de la desaladora de Villaricos que lleva inutilizada desde hace más de 10 años y a la que aún le quedan otros dos al menos para volver a funcionar, y 30 hectómetros cúbicos más de una planta desaladora que construirán los propios regantes de la zona con fondos propios), una desaladora que produzca 6 hectómetros cúbicos para los regantes de Adra, llegar hasta 50 de producción en la desaladora de Carboneras para esa zona y la Comarca de Níjar, y llegar hasta los 70 en Poniente aumentando de los 30 a los 40 en la desaladora de Dalías y construyendo otra de 20 hectómetros cúbicos ampliable hasta los 30.
Realizar las mejoras previstas en desaladoras
El portavoz de los regantes almerienses también ha señalado que “necesitamos que se realicen las inversiones previstas para las diferentes plantas desaladoras que hemos expuesto en reiteradas ocasiones, la ampliación de la de Poniente, en Dalias, también la ampliación de la de Carboneras y la puesta en funcionamiento de la del bajo Almanzora, en Villaricos, que lleva una década sin poder usarse”.
También, ha destacado Fernández, “hay que trabajar en la instalación de energías renovables asociadas a las plantas desaladoras ya que conseguiría rebajar el precio de la electricidad que se produce en el ciclo de generación” ya que, ha proseguido José Antonio Fernández, la situación para el regadío “es muy dura porque dependemos de la energía eléctrica, cuyo precio se ha disparado, además de las subidas en los costes de producción que también se han encarecido bastante”.
JOSÉ ANTONIO FERNÁNDEZ, Presidente de FERAL
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