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Al día de hoy, 512 artículos adornan mis archivos en el digital Almería-24 Horas. Escritos que vienen a secundar mi estado de ánimo. Un día me levanto de mala leche y escribo sobre política. Otros días mas benignos, sobre el humor y algunas noticias que leo y traslado a mi mente en plan irónico y a veces mordaz. Según sale el alba, mi regadera me observa y ya intuitivamente sabe lo que voy a escribir y se prepara para ello. Toda esa ancestral “linea editorial” que me impongo a veces lleva a confusión a mis lectores.
- ¡Pocos! – exclama mi regadera.
...lleva a confusión a mis pocos lectores y llegan a pensar y exclamar el consabido “de que va este…” pero a mi me llena de “orgullo y satisfacción” comprobar que mis escritos son publicados lo cual me lleva a la conclusión que mi editor, Miguel Parra, está peor que yo.
-Ya te digo – corrobora mi regadera.
- Ya te digo – asiento - pero caso extraño en el mundillo periodístico, nunca me han tachado ni un punto suspensivo. Inmaculado en su procedencia, así se edita. El “no es aconsejable” “suaviza el texto” o “que no dé nombres y acciona lo alegórico” no ha existido en Almería -24 Horas. (Hace un siglo, salí escarmentado de un periódico de buena tirada aragonés donde mis escritos eran tan debidamente rectificado perfilando su linea editorial, que cuando salía publicado, unas rebeldes lágrimas de emoción embargaba mi rostro al saber que el autor de dicho escrito se llamaba igual que yo) En la revista Cierzo, hice un exhaustivo reportaje de la contaminación de la Central Térmica de Andorra y me lo condenaron porque me confundí, según ellos, en la altura de la chimenea.
-¡Eso, fue culpa tuya por el vértigo que tenías! – me recrimina mi regadera – podía haberte subido encima.
Ya...ya...pero a lo que íbamos: Uu hecho notable fue que en compañía de un reportero aragonés, hicimos un reportaje sobre los primeras personas de raza negra que llegaron a Aragón. Se lo mandamos a Antonio Asensio, padre del actual, INTERVIU, y valoro el mismo en 100.000 pesetas en cuya portada aparecia Marsisol desnuda. Celebramos el éxito y le propuse a mi compañero -bajo cierta euforia y entusiasmo- hacer otro en Sidi-Ifni para analizar el porqué el dromedario tenia una joroba y el camello dos. Si había privilegios en esa raza artiodáctilo. Aun hoy en día, no se como perdí su amistad después de mi propuesta.
Lo dicho: recurro a los gruñidos cuando me levanto y acciono mi estado mental para escribir con humor o fijarme en novedades que te hace hervir la sangre como que han fichado a un futbolista, un tal “boca iguana”por el Real Madrid por 170 millones de euros que parece ser que ha sido muy aplaudido en las colas de INEM y estupefacción en nuestro cuerpo de bomberos de Almería calculando los servicios que prestan y las pocas oportunidades que tienen para cobrar solo un uno por ciento de esa cantidad. Nuestros médico y sanitarios/as que salvan vidas y desconocen lo que es el área pequeña . Todo eso, me afecta y escribo sobre ello. Lo complicado es que cuando mando el texto ,ya ha transcurrido una semana y parece que ha quedado obsoleto.
Sin embargo, ahí lo tengo; impoluto y sin esquilmar frases o contextos que puedan ser hirientes a quien vaya destinado. Un orgullo publicar para Almería 24 Horas aunque soy consciente de que al leer mis artículos, siempre opino que tenía que haberlo hecho mejor. Siempre te falta algo que has olvidado o no has añadido. Terminado este peloteo, seguiré escribiendo hasta agotar la paciencia de mi amigo y editor, Miguel Parra aunque después de nueve años, opino que se ha acogido al “modelo resignación” y ya tiene en conformidad su aguante.
Juan Marcelo
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